El tubo de hierro es una pieza hueca que puede ser redonda, cuadrada, rectangular u ovalada, y que tiene los extremos abiertos. En construccción es muy empleado en combinación con el hormigón. En la web de Alsimet están accesibles las tablas con los pesos y medidas de cada tipo de tubo de hierro, también descargables en PDF.
En ocasiones puede ser sustituido por los perfiles estructurales, porque ofrecen mayor resistencia y estabilidad. Sin embargo, comprar tubos de hierro resulta más económico y además tienen una serie de ventajas adicionales.
Ventajas del tubo de hierro en la construcción
Los tubos de hierro son ligeros y fáciles de montar y unir con soldadura, aunque pueden carecer de ella. Los soldados se fabrican doblando planchas y soldando las uniones.
El tubo de hierro para construcción, por sus dimensiones, requiere el uso de gran maquinaria para su fabricación. Pero, en general, los tubos férricos son elementos que ofrecen estos beneficios:
- Tienen mayor resistencia a la flexión que los perfiles estructurales y a la inestabilidad elástica.
- Permiten un mantenimiento sencillo y ofrecen un gran aguante a la corrosión.
- Dan más juego a nivel estético.
- Resultan un elemento más rentable que los perfiles.
Usos del tubo de hierro en construcción
El tubo de hierro rectagular se suele usar para componer elementos estructurales como los marcos de acero. Los marcos son básicos para transferir cargas al suelo en situaciones en los que factores externos, como terremotos o vientos fuertes, son frecuentes.
El tubo cuadrado o el redondo se emplea en columnas, vigas y otros elementos en los que la resistencia y fiabilidad son los criterios más relevantes.
Se usan con mucha frecuencia en la construcción de edificios de grandes dimensiones, como rascacielos, pero también en elementos decorativos, en balcones, barandillas, escaleras, maquinaria y estructuras de andamio. En este último caso resultan muy útiles por su fácil ensamblaje, al no ser necesarios tornillos, tuercas ni pernos. También resisten importantes pesos de personas y de máquinas.
Procesos aplicados al tubo de hierro en Alsimet
En Alsimet se manejan el laminado en frío, el laminado en caliente, el decapado y el galvanizado.
De la laminación en frío se obtiene un producto de mayor elasticidad y menos imperfecciones. Además, no implica la necesidad de decapado para evitar la oxidación. Este decapado es el proceso que permite eliminar impurezas de la superficie, como paso previo a la soldadura. Por su parte, en la laminación en caliente el hierro se puede trabajar con facilidad y permite elaborar piezas de mayor tamaño.
El galvanizado consiste en la aplicación de una capa de cinc al hierro, para mejorar su resistencia a la corrosión, sobre todo en condiciones ácidas. El hierro galvanizado se usa mucho en tuberías que están a la intemperie: ofrece una importante protección a las condiciones exteriores y apenas necesita mantenimiento. En construcciones de bajo coste se emplea también para distribuir el agua caliente y fría. Además, el tubo de hierro galvanizado se puede encontrar en piezas estructurales, en encofrados, en torres de alta tensión y en elementos de estructuras deportivas.